
Eh, ya se había tardado esto.
El primer poema del año es un complemento a Worlds apart... y todas las palabras que me trago a diario. Tal vez por eso parezca que no tiene orden.
Uno de estos versos lo escribí en Noviembre.
Ya quiero escribirte poemas bonitos, de esos que hablan de sosiego y de la sensación que te dio tu nombre, Shangri-la.
¿Puede que ese día sea hoy?
¿No te rindas?
Yo no me rendí,
yo siempre creí.
Aclaraste mi duda
de quién soy para ti.
Sólo déjame hacerte
un poquito más feliz.
Paso por tu calle
casi siempre por la tarde
y mido con la mirada
la distancia que nos separa.
Son unas cuantas yardas,
pero ambos sabemos
que no es eso lo que nos aparta.
Quisiera acercarme,
tocar tu puerta y saludarte,
pero no quieres verme…
es mejor que siga mi camino;
es mejor que me aleje.
Yo te quiero
y sí, te estuve viendo
durante todo el concierto.
Me parece fascinante
cada cosa que haces.
Haz que mi noche
no sea una más;
sólo tienes que hablarme.
Cambia mi cara
de idiota enamorada
por una sonrisa
con sólo mirarme.
Dale un giro a mi vida
con una llamada.
Empieza la historia
con una palabra.
Es cierto que vivimos
en mundos distintos
como es cierto que hay caminos
que conectan destinos.
Te veo esta noche en el punto intermedio
que conecta tu mundo y el mío.
No hay comentarios:
Publicar un comentario